El sindicato UGT ha pedido hoy en Toledo la creación de un Estatuto de Prácticas no Laborales que ponga fin a los “abusos” que sufren los jóvenes becarios, un estatuto que acabe también con los llamados “falsos becarios”, personas que entran en una empresa a través de una práctica no laboral pero que en realidad lo que están haciendo es sustituir a otro trabajador.
En rueda de prensa y acompañado por la secretaria de Empleo y Política Sindical de UGT Castilla-La Mancha, Isabel Carrascosa, el portavoz confederal de RUGE (Revolución Ugetista, la asociación creada en el seno de UGT para la defensa de los jóvenes), Eduardo Magaldi, explicaba que los “falsos becarios” representan uno de los principales fraudes que afectan a los jóvenes en el ámbito de las prácticas no laborales. También hacía mención a que muchos no reciben una formación real; a la falta de una tutorización efectiva; a las personas becarias que en realidad están sustituyendo vacantes en época vacacional; a la imposibilidad de coger días de asuntos propios; o a la dificultad de compaginar el calendario escolar con el de la empresa. “Hemos llegado a conocer empresas en las que un 70% son becarios y un 30% trabajadores por cuenta ajena”, añadía Magaldi.
Según las estimaciones realizadas por RUGE, en España hay un millón de personas haciendo prácticas no laborales. “Serían 315.000 puestos anuales, muy cerca de los 450.000 desempleados que tenemos en el país”. Añadía que, gracias a estas prácticas, al año las empresas se ahorran en salarios 3.316 millones de euros y otros 1.312 millones en cotizaciones a la Seguridad Social.
Como propuestas ante tal situación que viven los jóvenes, RUGE y UGT proponen –entre otras medidas- un registro nacional de prácticas; agentes sindicales becarios; potenciar la labor inspectora; el establecimiento de límites máximos de horas; mejorar la tutorización; una ratio máxima de personas en prácticas; compensación de gastos; cotizaciones a la Seguridad Social; determinar las titulaciones susceptibles de hacer prácticas no laborales…
Uno de cada tres accidentes ocurridos el año pasado lo sufrió un menor de 35 años
Por su parte, la secretaria de Empleo y Política Sindical de UGT Castilla-La Mancha lamentaba que, en muchas ocasiones, hablar de jóvenes es hablar de precariedad laboral y de bajos salarios. “La reforma laboral ha venido para contribuir a cambiar esta tendencia. De hecho, hemos podido comprobar el aumento de la contratación indefinida entre los menores de 30 años ya que, si en enero solo un 5,7% de los contratos que se les hacía eran indefinidos, en abril este porcentaje se incrementó hasta el 38,4%”.
No obstante, “seguimos teniendo una tasa de paro muy elevada entre los jóvenes; del 32,4% entre los menores de 25 años”. Para la Unión General de Trabajadoras y Trabajadores de Castilla-La Mancha también resulta muy preocupante las cifras de siniestralidad laboral y es que durante el año pasado uno de cada tres accidentes laborales ocurridos lo sufrió un menor de 35 años.
“Los jóvenes acceden a los trabajos más precarios y acceden a ellos con poca formación en materia de prevención de riesgos laborales. Es importante potenciar la formación y hacer de los centros de trabajo lugares seguros”. Del mismo modo, Isabel Carrascosa apuntaba la necesidad de que las empresas cumplan con la normativa en materia de la prevención y reforzar la Inspección de Trabajo.
Recordaba que UGT ha puesto en marcha una campaña especial de afiliación para los jóvenes por solo 1 euro al mes. En este sentido, los estudiantes en situación de desempleo menores de 25 años tienen una cuota mensual de un 1 euro al mes para pertenecer a la asociación RUGE y estar bajo el cobijo del sindicato como un/a afiliado/a más.