UGT lamenta las condiciones laborales que continúan sufriendo los trabajadores de Agrocuna (Daimiel), cuya plantilla permanece con vacaciones forzosas y no negociadas y con impagos de salarios, una situación que se prolonga durante dos meses sin que la empresa haya presentado aún el Expediente de Regulación de Empleo extintivo que anunció en su momento.
Agrocuna -dedicada a la distribución de cebollas y con más de un centenar de trabajadores y trabajadoras- ha sido denunciada por el sindicato ante la Inspección de Trabajo. Las injusticias hacia la plantilla no se centran solo en retrasos e impagos de nóminas -algo que se viene produciendo desde hace dos años- sino también en la persecución y presiones que viven los delegados sindicales de UGT. Tanto es así que Agrocuna llegó a despedir a varias personas que formaban parte de la candidatura de UGT a las elecciones sindicales.
Además, la Unión General de Trabajadores y Trabajadoras explica que Sanidad ha procedido a cerrar varias zonas de la empresa debido a las condiciones en las que se encontraban estas instalaciones (con desagües que no funcionaban y que producían inundaciones), a lo que suma que Agrocuna aún no cuenta con un plan de igualdad.
UGT ha elevado también a la Inspección de Trabajo los problemas en materia de seguridad y salud laboral que tienen las pocas personas que sí están yendo a trabajar a Agrocuna. Según explican desde la sección sindical de UGT, “hemos llegado a ver a trabajadores subidos en una horquilla de carga de carreterillas elevadoras sin ningún tipo de protección y encima de palets, carretillas en algunas de las cuales no funciona el freno y las ruedas están desgastadas”.
Actualmente Agrocuna tiene una plantilla de algo más de 100 personas. De ellas 54 están en Expediente de Regulación de Empleo Temporal. Estos trabajadores en ERTE son los que venían realizando sus funciones en las instalaciones clausuradas por Sanidad. El resto del personal -salvo el personal de oficina y dos o tres encargados que sí están yendo a la empresa a trabajar- permanece desde el 1 de febrero en vacaciones forzosas.