Tras conocerse los datos del IPC del mes de junio publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el sindicato considera estas cifras un balón de oxígeno para muchas familias de Castilla-La Mancha.
Nuestra comunidad autónoma ha sido la que mayor descenso ha registrado. Concretamente el IPC ha bajado 1,8 puntos, situándose en un 1,2. Somos la segunda comunidad autónoma con el IPC más bajo, sólo detrás de Aragón.
La secretaria de Empleo y Política Sindical de UGT CLM, Isabel Carrascosa, ha valorado de forma positiva estos datos, pero recuerda que hay que seguir trabajando por los colectivos más vulnerables, y por la mejora de los salarios.
“Consideramos que es necesario trasladar los incrementos acordados en el nuevo AENC 2023-2025 a los convenios colectivos pendientes de firma, protegiéndose así el poder adquisitivo de las familias trabajadoras y ayudando con ello al reforzamiento del consumo y la senda de crecimiento económico de nuestro país. El que los precios bajen, sin duda es una buena noticia para muchas familias castellanomanchegas. Pero lo verdaderamente importante es blindar el poder adquisitivo de los ciudadanos y ciudadanas, para que no dependa de los vaivenes de los precios. Y para ello, las cláusulas de revisión salarial son fundamentales”.
La tasa anual del IPC ha bajado 1,8 puntos en Castilla-La Mancha
Castilla-La Mancha es la región donde más ha bajado el IPC durante el mes de junio. Y nos situamos como la segunda comunidad autónoma con el IPC más bajo con un 1,2. Sólo detrás de Aragón que registra un 1,1%.
Baja fundamentalmente el transporte con un -7,7 %, un descenso que se debe a que la subida de los precios de carburantes y lubricantes para vehículos personas es menor que la de junio del año pasado.
También bajan los alimentos y bebidas no alcohólicas, con una tasa del 9,9 %. Debido fundamentalmente al precio de las frutas, el pan y los cereales y la carne, que han aumentado menos que en junio de 2022. Y también desciende especialmente la vivienda, que disminuye su variación hasta el -17,6 %. Debido a que los precios de la electricidad aumentan menos que el año pasado y a que los combustibles líquidos han bajado.