UPTA CLM pide medidas excepcionales para los autónomos de los municipios toledanos con más restricciones por la COVID-19

UPTA CLM considera que las nuevas medidas sanitarias para frenar la COVID-19 pueden hacer insostenible la situación de estos profesionales, que ya han visto mermada su facturación más de un 50% en muchos casos.

La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos de CLM pide medidas excepcionales para paliar la situación de los más de 3.500 autónomos de Seseña, Illescas, Cebolla y Yuncos que se verán afectados por las últimas medidas de carácter excepcional de la JCCM para contener la COVID-19.

Los sectores más afectados son el comercio y la hostelería, que nuevamente ven reducidos sus aforos, sus horarios de trabajo y sus actuaciones, con restricciones como no poder servir en las barras de los bares. Según César García, secretario general de UPTA CLM, la hostelería ya está por debajo del 50% de su facturación respecto al mismo periodo de 2019 y el comercio no llega al 60% por lo que estas medidas abocarán a cesar su actividad a muchos de los autónomos. «Somos conscientes de que la salud es lo primero, pero, ante medidas sanitarias excepcionales exigimos también medidas económicas excepcionales», defiende.

Además, la organización de autónomos sostiene que ha vuelto a fallar la interlocución con las administraciones. “Se han tomado medidas sin análisis económicos y, por eso, desde UPTA CLM consideramos urgente y necesario tomar medidas que apoyen a estos autónomos antes de que nos carguemos el tejido empresarial de nuestra región”.

A pesar de que muchos autónomos ya están optando por alternativas como habilitar las ventas por internet y por canales de venta no presenciales, fallan en el transporte de última milla, una cuestión obviada por las AAPP hasta el momento y reivindicada por UPTA desde el inicio de la pandemia.

Por ello, UPTA CLM considera necesario que se acometan al menos las siguientes medidas económicas por parte de la Junta, de la Diputación Provincial y de los ayuntamientos:

  • Calificar a los autónomos de estos Municipios, y de otros que seguramente estarán en un futuro en las mismas circunstancias, como autónomos de alta vulnerabilidad, siendo prioritarios en las resoluciones de ayudas y subvenciones.
  • Incluir en la futura línea de subvenciones Re-Inicia a estos autónomos como prioritarios, hayan o no hayan percibido la subvención de apoyo económico a autónomos y microempresas por causa de la COVID-19.
  • Fomento por parte de las AAPP de los canales de venta telemáticos, con ayudas específicas para que comerciantes y hosteleros puedan seguir ejerciendo su actividad, y que contemplen ayudas a la presencia en la red, a equipos de comunicación, a herramientas de venta, y a envases para el transporte de los productos en condiciones higiénico sanitarias adecuadas.
  • Fomento por parte de las AAPP, especialmente de ayuntamientos, del transporte de última milla para facilitar a los autónomos la entrega a domicilio. Este servicio se puede licitar o simplemente apoyar económicamente en la constitución de cooperativas con parados de larga duración y personas en riesgo de exclusión.
  • Habilitar una línea especial de financiación para estos autónomos de extrema vulnerabilidad, a través del Instituto de Finanzas de Castilla-La Mancha, a interés cero y de forma ágil y flexible.
  • Si el Estado no flexibiliza para estos autónomos en extrema vulnerabilidad las condiciones de acceso a la prestación ordinaria por cese de actividad, la Junta debería plantearse una ayuda similar para poder paliar la catástrofe económica.

“Volvemos a ponernos a disposición de las AAPP para ayudar en lo que sea necesario, y aprovechamos para recordar a los ayuntamientos que no están exentos de pasar por esta situación, por lo que cuanto antes estudien y acometan medidas para apoyar a sus autónomos, más fácil será llegar a la tan deseada normalidad económica”, concluye García.

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