«Los descansos que han tenido los trabajadores han sido pésimos ya que en ocasiones no han podido volver a casa por el temporal y han tenido que dormir en bancos, vehículos o en sillas de oficina, sin que nadie se haya preocupado por esta situación», indican desde la Federación de Servicios Públicos de UGT
La Federación de Servicios Públicos de UGT Castilla-La Mancha ha denunciado las «lamentables» condiciones laborales que han tenido que sufrir los trabajadores de Fomento en los trabajos de retirada de nieve durante el temporal de Filomena.
Para el sindicato ha sido manifiesta la falta de personal para la retirada de nieve. Ponía el ejemplo de Guadalajara, donde lo que antes se hacía con más de 100 empleados ahora se ha tenido que hacer con menos de 60. Esto ha supuesto que las jornadas de trabajo hayan sido de más de 12 horas consecutivas durante todos los días del temporal de nieve.
«Los descansos que han tenido los trabajadores han sido pésimos ya que en ocasiones no han podido volver a casa por el temporal y han tenido que dormir en bancos, vehículos o en sillas de oficina, sin que nadie se haya preocupado por esta situación, llegando incluso a vulnerar los protocolos COVID -19 establecidos», pone de manifiesto Luis Miguel García, responsable de Fomento en FeSP UGT.
Desde UGT recuerdan que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha tiene organizado este trabajo a través de voluntarios dentro de la plantilla de personal laboral de Fomento. En este sentido, explica que la Junta incumple el vigente convenio colectivo que le obliga a contar con un protocolo de vialidad invernal, lo que hace que estos trabajadores no tengan una adecuada retribución de las horas extraordinarias.
UGT lamenta que el Gobierno regional siga manteniendo tras casi seis años a empresas privadas de apoyo a la conservación de carreteras, en contra de lo que prometieron en campaña electoral, empresas que «han funcionado de manera muy deficiente en la zona que tienen encomendada». También exige al Ejecutivo que cumpla con su promesa de abrir los centros de trabajo de Villanueva de Alcorón y Molina de Aragón, cerrados por la anterior Administración.