A lo largo de los 13 meses que llevamos de pandemia, se han promulgado varios decretos para atender a la situación en que quedaba el personal sanitario en caso de baja laboral o fallecimiento por enfermedad Covid en el desarrollo de sus funciones, reconociéndose finalmente como enfermedad profesional. Sin embargo, esta enfermedad profesional por Covid solo se reconocía expresamente para el personal sanitario, dejando fuera a colectivos como el de los celadores, “cuyo trabajo, ahora y siempre ha sido fundamental”
UGT Castilla-La Mancha se ha felicitado de que, al fin, tanto la Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones como la Subdirección General de Ordenación y Asistencia Jurídica del Instituto Nacional de la Seguridad Social hayan reconocido el papel realizado por los celadores y celadoras de los centros sanitarios y socio-sanitarios en la lucha contra la pandemia.
A lo largo de los 13 meses que llevamos de crisis sanitaria, se han promulgado varios decretos para atender a la situación en que quedaba el personal sanitario en caso de baja laboral o fallecimiento por enfermedad Covid en el desarrollo de sus funciones, reconociéndose finalmente como enfermedad profesional. Sin embargo, esta enfermedad profesional por Covid solo se reconocía expresamente para el personal sanitario, dejando fuera a colectivos como el de los celadores, “cuyo trabajo, ahora y siempre ha sido fundamental”.
El responsable de Sanidad de UGT Servicios Públicos en CLM, Fernando Peiró, aplaude que este reconocimiento se haga extensible a los celadores y celadoras, si bien ha apuntado que el sindicato seguirá reivindicando el mismo derecho para otros profesionales.
“Era inconcebible que perpetuaran este agravio entre distintas categorías de profesionales sanitarios, máxime cuando todos ha tenido la misma exposición al contagio”, apunta Peiró. “No sabemos si fue por desconocimiento por parte de la administración –al no conocer la labor tan cercana al paciente que desarrolla un celador o celadora- o simplemente por motivos económicos, pero era algo que no íbamos a tolerar”, concluye.