La plantilla de Atento Toledo ha secundado la huelga de 24h en un 100%, un hecho histórico que marca un antes y un después en la lucha obrera, como modo de protesta ante lo que desde el comité de empresa califican como un ERE encubierto.
El pasado 1 de julio se constituyó la mesa de negociación, y la empresa informó de que se iban a aplicar modificaciones sustanciales y/o movilidad geográfica a un total de 553 afectados en toda España. En el centro de Toledo, uno de los más afectados, la cifra asciende a 134 personas trabajadoras, a las que se les aplicaría una movilidad geográfica con traslado al centro de Rivas (Madrid). Incluso hacen desaparecer uno de los departamentos del centro de Toledo (reclamaciones económicas de MOVISTAR), para prestar su servicio fuera de España (Bucaramanga, Colombia).
Cabe destacar que en el centro de Toledo se presta íntegramente servicio a la empresa MOVISTAR, donde más del 85% son mujeres, la mayoría de ellas con reducción de jornada por hijo a cargo, que se suma a precariedad salarial del sector.
La tercera reunión del proceso de negociación celebrada ayer arrojó pocos resultados. La empresa se limitó a escuchar las propuestas de la parte social entre las que destaca que se dé prioridad a la reducción de las movilidades geográficas y el teletrabajo para mantener los empleos y que prevalezca la voluntariedad.
Ante esta medida arbitraria y sin fundamentos sólidos el Comité de Empresa y las personas trabajadoras de Atento Toledo han manifestado su voluntad de lucha y reivindican su papel como personal «Imprescindible», tal y como se les calificó en plena pandemia.
Además, subrayan que la externalización de los servicios de Movistar no redunda en beneficios ni para los clientes directos ni para la empleabilidad del territorio y de España.