Con motivo de la Semana Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo, UGT Castilla-La Mancha pide afrontar los riesgos laborales asociados a la digitalización, una realidad que ha supuesto la irrupción de nuevos factores que afectan a la salud de los trabajadores y trabajadoras, ante los que el sindicato pide cumplir con la normativa vigente y reforzar las medidas preventivas.
Promovida por la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo, este año el lema de la campaña es “Trabajos seguros y saludables en la era digital” y es que en esta ocasión la agencia ha puesto el foco en la digitalización de los entornos laborales. “La tecnología digital ofrece a las personas trabajadoras y a las empresas de todos los sectores mayores oportunidades, pero también plantea grandes retos y riesgos en términos de seguridad y salud. De hecho, las áreas prioritarias de la campaña de 2024 son el trabajo a distancia e híbrido, el trabajo en plataformas digitales y la automatización de las tareas”, pone de manifiesto Irene Ortega, coordinadora regional de Prevención de Riesgos Laborales de UGT Castilla-La Mancha.
“Con los algoritmos y la digitalización hay riesgo de que las personas trabajadoras sean tratadas como meros activos fungibles al servicio de las máquinas y no como seres humanos. Confiar únicamente en los datos y las métricas dando potestad al algoritmo para decidir el destino del trabajador/a puede potencialmente deshumanizar a los trabajadores reduciéndolos a comportarse como una maquina más dentro del proceso productivo”.
Los daños para la salud ya están presentes entre la población trabajadora, por ejemplo, el tecno estrés que viene derivado de la sobrecarga o exceso de demanda en el trabajo y está influido por el aumento de la despersonalización favorecido por la comunicación a través del ordenador; también podemos mencionar las interrupciones continuas o el exceso de supervisión facilitado por las nuevas tecnologías o el caso de las tecno adicciones, como la nomofobia o fobia a los móviles o el phubbing o no prestar atención a los demás, sino que solo se atiende al teléfono.
Según datos de la Encuesta OSH Pulse 2022 realizada por la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo, el 61,2% de los trabajadores/as en remoto ve cómo la velocidad o su ritmo de trabajo está determinado por las tecnologías digitales. Además, el 56,8% sufre aislamiento social y el 46,9% una severa presión de tiempo o sobrecarga de trabajo.
“Existen una serie de factores psicosociales y organizativos a los que se debe prestar atención y prevenirse para que no se materialicen en daños para la seguridad y salud de los trabajadores/as, como por ejemplo el tiempo de trabajo, la hiperconectividad, la carga de trabajo cuantitativa, la sobrecarga cualitativa, la demanda psicológica de naturaleza cognitiva, etc”.